La moussaka, al igual que la lasaña, es uno de esos platos que siempre triunfa. Y es que la combinación de esas capas, con tanto sabor y diferentes texturas, junto con la salsa bechamel casera, la hacen irresistible.
No pierdas esta receta de moussaka que te aseguro que la vas a repetir.
Ingredientes para la bechamel casera:
- 2 cucharadas de mantequilla
- 2 cucharadas de harina de trigo
- 250ml de leche
- 1/2cp de nuestra mezcla de especias para pastel de calabaza
- una pizca de sal
Cocinarla a fuego muy bajito y sin parar de remover para que no se formen grumos. Una vez lista, reservamos.
Ingredientes de la primera capa de carne:
- 2 cebollas
- 2 dientes de ajo picados
- 500g de carne picada, yo usé de pollo
- 4 cazos de salsa de tomate frito casera
- 1cp de nuestra mezcla de especias gyros
- una pizca de sal
Cocinamos primero la cebolla, y cuando esté blandita añadimos el ajo y luego la carne y las especias. Al añadir la salsa de tomate bajamos el fuego al mínimo y dejamos que se integren los sabores. Esta es la primera capa y la base de nuestra moussaka, que empezamos a montar en un recipiente apto para el horno.
Para la última capa necesitas:
- 1 berenjena
- 1 pimiento rojo
- 1cp de la mezcla de especias gyros
- una pizca de sal
Cocinamos las verduras en la sartén pero sin que lleguen a quedar excesivamente blandas, para que tenga un toque crujiente. Las ponemos en el recipiente de horno sobre la capa anterior de carne.
Por último añadimos toda la bechamel que preparamos en primer lugar por encima, queso mozzarella y gratinamos en el horno unos 10 minutos a 200C (hasta que la veas doradita).
Te va a encantar, tienes que probarla.
¿Has preparado alguna vez moussaka en cada? ¡Cuéntamelo en comentarios y por Instagram!
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