Qué le diría a alguien que quiere empezar a emprender:
A veces me pregunto por qué estas cosas y las formas adecuadas de emprender no nos las enseñan en la escuela.
Vivimos en una sociedad y cultura que te prepara para buscar un empleo y la mayor parte de la gente tiene como objetivo opositar para conseguir un trabajo estable, y lo entiendo después de comprobar lo duro que es emprender en este país.
La escuela no te enseña qué es una declaración de la renta, qué es y cuantos tipos de IVA hay, a dónde va a parar todos esos impuestos que nos cobran, cómo entender una nómina o una carta de hacienda y mucho menos qué tienes que hacer si quieres ser autónomo o montártelo por tu cuenta. Pero si te enseña química orgánica e integrales en matemáticas, aunque tu intención sea ser profesor de primaria.
Si este escrito llegara a alguien responsable de la educación en nuestro país, me alegraría si al menos sirviese para que pensaran sobre la escasa educación que tenemos en relación con la vida laboral, el emprendimiento o la formación para el autoempleo.
Si esto existiera podríamos ser un país más rico, ya que no necesitaríamos de las ayudas del gobierno por estar en una situación de desempleo (tan común por desgracia) y sin conocimientos o medios para poder ser independiente trabajando para tí mismo, dejando por una parte de ser una carga económica para el estado y por otra generando riquezas al pagar impuestos y con suerte ofreciendo nuevos puestos de trabajo.
Eso en materia de educación, no me voy a meter en las diferencias que tenemos con otros países en relación a las pocas o ninguna facilidades económicas que tenemos en materia de impuestos, una vez que empiezas a ejercer como autónomo.
Por lo tanto, cuando alguien me pregunta sobre emprendimiento y cómo hacer para empezar, lo primero que recomiendo es especializarse.
Os dejo por aquí el directo que hemos hecho hoy Susana de @mama.quecomemoshoy y yo hablando de cómo emprender y dando algunos consejos que os pueden ser muy útiles:
1. Especialízate:
Si tu objetivo es la venta de productos lo tienes muy duro.
Hoy en día hay casi de todo y a precios de risa, la competencia es tan brutal que como no te enfoques en ser especialista en algo o vender algo muy concreto, me temo que con cualquier búsqueda en internet podrán encontrar lo mismo pero más barato.
Me da mucha pena ver como cierran continuamente negocios tipo “desavíos” que venden las mismas cosas que venden en supermercados pero más caras (no se puede competir con ellos), teniendo incluso el mismo horario laboral o incluso más estrecho (abriendo solo por las mañanas).
Sin embargo, si necesitas algo un domingo o un festivo no hay tienda que esté abierta. Ahí veo yo una oportunidad, pero nadie abre un negocio tipo “desavío” solo domingos o festivos, aunque yo iría a comprar porque son los días que estoy libre para hacerlo.
Por eso, si tu objetivo es vender, lo que yo te recomendaría sería vender algo en lo que seas un experto, que conozcas al detalle el producto y puedas ofrecer una amplia gama de posiblidades ofreciendo un asesoramiento personal, que es lo que no te pueden ofrecer en supermercados, grandes almacenes o amazon.
Yo me especialicé en especias y te cuento por qué.
Empecé como cualquier herboristería comprando un poco de todo: especias, hierbas medicinales, tés e incluso inciensos, pero al poco tiempo me di cuenta de que lo que ofrecía era igual a lo que se podía encontrar en cualquier otra tienda. Nada me hacía diferente.
Otro de mis objetivos al principio era tener el mayor catálogo de especias de internet y lo conseguí, no te puedes imaginar la de especias exóticas que compré de otros países que aquí en España no se encontraban, pero por una simple razón: muy pocos las usaban y por lo tanto no las vendía.
Por lo que con el tiempo se estropeaban o perdian su sabor al tenerlas tanto tiempo almacenadas.
Una vez más me equivoqué en el enfoque de mi negocio.
Cuando sí acerté fue cuando empecé a hacer mis propias mezclas 100% naturales sin sal, azúcares o aditivos, también sin gluten.
Con la observación me di cuenta de que todos los fabricantes de especias que conozco usan mogollón de aditivos en sus mezclas con el fin de que sean condimentos más sabrosos, que enganchen y a la vez puedan rebajar costes.
La sal es muy barata y está presente en la mayoría de condimentos que te encuentras en el mercado, en una proporción de la mitad o a veces incluso más. También se les añaden potenciadores del sabor (como el glutamato) o ahora también los camuflan con otros nombres.
Todo el mundo puede encontrar una mezcla para fajitas en cualquier sitio y a precio de risa. Pero nunca encontrará una cómo la mía puesto que la fórmula es única (la inventé yo), que para mi gusto es la mejor, además no tiene azúcares ni sales ni ningún tipo de aditivos y también es sin gluten.
Por lo tanto, condimentos listos para usar, que esté compuesto por especias puras, sin sal ni aditivos era una cosa muy innovadora con la que sí me podía diferenciar. Sobre todo ahora con el movimiento y concienciación tan fuerte que hay con la comida saludable o realfood.
Otra perspectiva que me ha diferenciado es proveerme de especias sin gluten. Ahí me di cuenta de que había una necesidad, gracias a los comentarios y peticiones de los celíacos.
Por lo tanto, considero que si hoy, después de 10 años de haber iniciado mi negocio, sigo aquí ha sido por eso; porque he encontrado mi lugar, mi nicho de mercado, al haber visto una necesidad y creado mi propio producto, único y original, orientado a ello.
Un punto importante es también dar ideas o enseñar a utlizar mis condimentos, cosa que hago cada día en las redes sociales. Normalmente las utilizo en recetas tradicionales, para demostrar que añadiendo especias a ellas se pueden mejorar o dar un toque diferente a cada uno de tus platos que estés acostumbrado a hacer. Un simple filete de pollo o berenjena se puede convertir en un auténtico placer al comerlo, con simplemente añadirle ciertas especias.
En definitiva, lo que te vengo a decir con mi experiencia, es que sí, vendo productos, pero puedo seguir compitiendo en el mercado porque me he diferenciado de los demás.
2. Si vendes servicios:
Todo lo que te he explicado es en el caso de vender productos. Pero si volviera a empezar seguramente no me decantara por la venta de productos, sino de servicios.
Empezaría poco a poco, haciéndome un nombre, dándome a conocer creando un proyecto sobre algo concreto que me gustara mucho y me diferenciara también.
Lo bueno que tienen los servicios es que apenas tienes que invertir ni gastar.
De momento hacienda no te cobra por tener una página web (aparte del IVA que pagas por tenerla y crearla), un perfil social o por crear contenido (llegará el día en que sí seguro), con lo que todo lo que trabajes en crear tu nombre o marca personal te estará saliendo a coste cero.
Si vendes productos tienes que empezar pagando un autónomo desde el minuto cero junto con todo lo demás. Pero si vendes servicios no, nada más empezar.
Puedes empezar a darte a conocer sin gastos, con lo que es ideal. Y cuando consideres que el precio de tus servicios puede ser rentable para pagar todo lo que te vendrá encima en cuanto te des de alta como autónomo podrás empezar.
Pero empiezas sabiendo que no tienes nada que perder. ¿No es genial?
Pues esa sería mi recomandación en el caso de alguien que quiera emprender, pero sin dinero para invertir o empezar.
También puedes iniciarte vendiendo productos, como hice yo, pero con algún sustento económico para poder vivir. Te cuento mi experiencia:
Para poder mantener mi negocio, tanto mi marido como yo hemos tenido otros trabajos. De forma que todo lo que ganaba con TodoEspecias se quedaba en TodoEspecias. Era la única forma de poder continuar y crecer. No saqué un sueldo ni pudimos dejar nuestros otros trabajos hasta el año pasado, 9 años después de empezar.
Montones de personas me decían que no merecía la pena tanto esfuerzo y trabajo sin cobrar. Pero eso es por el enfoque que tiene cada persona.
Para mí, mi negocio ha sido siempre una inversión: el fruto de lo que trabajo ahora lo recogeré en el futuro. Así he pensado siempre.
Yo miraba al futuro y me veía viviendo de mi negocio, siguiendo mis propias reglas y forma de trabajar. Sabía que cada hora invertida era un trabajo invertido en mí, con lo que nunca me ha pesado trabajar sin cobrar.
Es como el esfuerzo tan espartano que hacemos los padres al educar, nadie nos lo paga (en dinero) pero sabemos que merecerá la pena con el tiempo cuando veamos a nuestros hijos crecer y ser felices.
Por lo tanto, si tu objetivo es poder tener un sueldo desde el principio, quizás montar un negocio no sería la mejor opción. Hablando siempre desde mi experiencia y lo que conozco.
En defi nitiva y desde mi punto de vista, las claves para emprender son:
- Primero ten claro cuáles son tus objetivos, vender productos o servicios.
- Fórmate muy bien en lo que vayas a hacer, especializarse es lo que marcará la diferencia.
- Conócete, vas a trabajar muchas horas en ello y es importante que disfrutes haciéndo algo que te guste.
- Da pasos cortos pero firmer. Si algo no sale bien es más fácil retroceder un poco y tirar para otro lado que jugártela invirtiendo mucho dinero. Sobre todo sin tener seguridad de que vaya a salir bien.
- Mantén una actitud positiva, vas a enfrentarte a muchas dificultades que tendrás que superar con calma y confianza.
- Cree en tí, muchas personas pondrán en duda lo que haces, pero siempre desde la perspectiva de sus propias limitaciones. Si ellos no se ven capaces de conseguirlo van a creer que tú tampoco.
- Y por útlimo se paciente, puedes conseguir lo que te propongas con tiempo y constancia.
Deja un comentario