Ya van apeteciendo ¿o no? Reconozco que es un dulce que me encanta pero menos mal que se prepara una vez al año, porque no cabría por la puerta si tuviera esto a mi alcance durante el resto de los días. (más…)
Pestiños andaluces

¡Estamos en mantenimiento! Disculpa las molestias, volveremos muy pronto
Ya van apeteciendo ¿o no? Reconozco que es un dulce que me encanta pero menos mal que se prepara una vez al año, porque no cabría por la puerta si tuviera esto a mi alcance durante el resto de los días. (más…)
Esta ensalada la probé en un restaurante Japonés y me parecía imposible que me gustara tanto sólo llevando pepino, que está bueno, pero no se me hubiera ocurrido a mí hacer una ensalada sólo con ellos. Pues está muy buena, si, y las semillas de sésamo tostaditas me recuerdan a una mezcla entre pipas y palomitas, así muy crujientes y cálidas que contrastan con el frescor veraniego del pepino. Pruébala, te encantará.
¿Qué necesitamos?
¿Cómo se hace?
El aceite de sésamo le acentúa el sabor a las semillas y el vinagre de arroz es muy suavito y rico. Yo no he probado esta ensalada con aceite de oliva y vinagre normal pero seguro que también está buenísima, así que si no tienes estos ingredientes asiáticos no pasa nada y prueba con los que tengas a mano, seguro que estará genial también.
Las especias dukkah son una mezcla egipcia de especias y frutos secos, con un sabor tan apetecible que se te antoja usarlo con todo. Contiene avellanas, pistachos, sésamo, comino, cilantro y un toque de pimienta. Esta combinación la hace ideal para numerosos platos como guisos, rebozados, sazonada sobre un pan con un poco de aceite, como condimento de ensaladas, etc. Así que hoy se me ha ocurrido usarla para hacer una vinagreta para mi ensalada, que nunca hago dos iguales… Os cuento cómo la he hecho:
¿Qué necesitamos?
¿Cómo se hace?
Las frutas deshidratadas nos dan mucho juego para hacer vinagretas o salsas, y cómo quedan tan bien con los frutos secos, al combinarlos conseguimos un abanico muy grande de posibilidades para hacer cientos de aliños diferentes. Además de darle color y aportarnos los beneficios de la fruta.
Tenía muchas ganas de preparar esta receta porque mucha gente nos pregunta como se hace la tahina (o tahini) para el hummus y aún no lo habíamos probado. Así que nos pusimos manos a la obra y ahora lo compartimos con vosotros:
Primero preparamos la tahina, que es una pasta de semillas de sésamo, hecha a base de semillas tostadas y molidas con un poco de agua. La elaboración es la siguiente:
Para 100 gramos de semillas nos resultan unas dos o tres cucharadas de tahina, justo lo que necesitamos para preparar el hummus.
Para preparar el hummus:
Enjuagamos y escurrimos los garbanzos cocidos, yo he usado un bote de unos 400 gramos, y los batimos junto a las dos cucharadas de tahina, el zumo de un limón y un poco de sal. Ya lo tienes listo.
La receta original lleva también dos dientes de ajo o sal de ajo, los puedes añadir si quieres. Yo los he hecho sin ellos y queda delicioso también.
Para que quede súper cuki le puedes espolvorear un poco de comino molido y pimentón por encima, cuando ya lo tengas emplatado, y acompañarlo de unas verduritas o chips de maíz ¡y a disfrutarlo!