Los calabacines, igual que las berenjenas, tienen una forma que da mucho juego para cocinarlos al horno porque los puedes rellenar de lo que se te antoje y luego gratinarlos, quedando un plato súper sano y muy apetecible a la vista.
Esta vez los hemos rellenado de un sofrito de verduras y jamón sazonados con especias dukkah, que están requetebuenas porque aparte de especias lleva varios tipos de frutos secos que al comerlos sientes el crujiente de ellos y te resulta súper orgásmico, y todo esto sin exagerar. Bueno, te cuento como los he hecho:
¿Qué necesitamos?
- Verduras: 3 calabacines, 1 cebolla, 1 zanahoria, 1 pimiento y 1 tomate.
- Unos taquitos de jamón o carne picada.
- Un chorreoncito de vino blanco.
- Aceite de oliva.
- Pan rallado.
- Queso rallado para gratinar.
- Especias: 1 cucharada de especias dukkah, pimienta negra recién molida, orégano y sal.
¿Cómo se hace?
Lavamos y cortamos los calabacines longitudinalmente. Los salpimentamos y los metemos en el horno hasta que estén blanditos.
- Hacemos un sofrito con las verduras cortadas en trocitos muy pequeñitos, rehogadas en aceite de oliva.
Le añadimos el jamón y las especias. Removemos y le añadimos el vino blanco. Esperamos a que reduzca.
- Sacamos los calabacines del horno, los vaciamos con cuidado de no quemarnos e incorporamos el interior en el sofrito. Removemos durante unos minutitos.
Cogemos el sofrito y lo metemos en el interior de los calabacines, le espolvoreamos un poco de pan rallado, queso y orégano y los gratinamos unos minutos más en el horno. Voilá!
Que pintaza tienen y que ricos están. Seguro que se te antojan unos cuantos para cenar.