En este post te vamos a hablar sobre lo que comemos… No te asustes, conocer y tener clara toda la información alimentaria es fundamental y te ayudará sobre todo a ti.
La razón es sencilla, desde el 13 diciembre de 2014 las empresas (restaurantes, mercados, tiendas, etc,) están obligadas a informarte sobre la posible presencia de alérgenos que puedan contener los alimentos que te suministren.
Para ello, en la etiqueta debe aparecer las sustancias incluidas que pueden suponer un riesgo para las personas con alergia o, en otros casos, con intolerancia a determinados alimentos.
Hace bastante tiempo que me dedico al tema de la seguridad alimentaria o, dicho de otra manera, elaborar cursos de manipuladores de alimentos, ayudar a restaurantes a tener un control sobre sus alimentos, formación a empresas como mataderos, etc. y desde mi punto de vista, elaborar una lista sobre alérgenos basada en el continuo proceso de mejora de lo que comemos (seguridad alimentaria), era una demanda lógica dado el aumento de casos de alergias e intolerancia a diferentes tipos de alimentos.
Por darte un dato, ¿sabías que en los últimos 20 años el número de personas que sufren algún tipo de alergia y/o intolerancia alimentaria se ha multiplicado por dos solo en nuestro país? Increíble, ¿verdad?
¿Sabes qué es una alergia y/o intolerancia? Fácil, yo te lo explico de manera sencilla:
Las alergias e intolerancias alimentarias son reacciones adversas a cierto tipo de comidas, achacables a la ingesta, el contacto o la inhalación de un alimento o a alguno de los componentes que lleva.
Estudios actuales, demuestran que más del 10% de la población declara algún tipo de reacción adversa a algún alimento.
Y para tu información, respecto al este sector de la hostelería, este es listado de los 14 alérgenos que todo local o negocio deberá mostrar:
- Cereales que contengan gluten.
- Crustáceos y productos a base de crustáceos.
- Huevos y productos a base de huevo.
- Pescado y productos a base de pescado.
- Cacahuetes y productos a base de cacahuetes.
- Soja y productos a base de soja.
- Leche y sus derivados.
- Frutos de cáscara.
- Apio y productos derivados.
- Mostaza y productos derivados.
- Granos de sésamo y productos a base de granos de sésamo.
- Dióxido de azufre y sulfitos.
- Altramuces y productos a base de altramuces.
- Moluscos y productos a base de moluscos.
Como conclusión final decirte que no pretendo que salgas con miedo a comer o cenar por ahí, en este artículo solo pretendo informarte sobre la forma de actuar que los locales dedicados a la hostelería deben llevar a cabo, después será tú quien decida que hacer con toda esta información, que espero que te ayude.
Artículo escrito por Paula Sanz, profesora de seguridad alimentaria y curso de manipulador de alimentos online.
María
abril 17, 2017Solo quiero responder a algo que creo que es muy importante.
Sufro intolerancia desde hace muchos años, le achaqué la destrucción de la flora intestinal con espasmos diarios, a todo lo habido y por haber: dejé leche, pan, grasas, mi dieta se redujo a casi nada. Estuve con el acierto-error varios años. Observé que las diarreas, mejor dicho, colitis ¡que cursaban con estreñimiento!, se producían después de 48 horas de comer algo, así que lo eliminaba. En un viaje, un herborista, titulado en farmacia, me aconsejó un suplemento de prebióticos y probióticos, aunque no entendí muy bien porqué lo guardé. Algo había tomado de farmacia que dejó de fabricarse, que me recomendó un amigo médico. Lo tomé y noté cierta mejoría.
El médico de digestivo me dijo que al no tener vesícula estaría tomando grasas -que ya había suprimido-y que intentara añadir alguna cosa más alguna cosa más. Pero no eran las grasas.
Pues bien, un buen día, cuando estaba ya en el arroz blanco con alguna verdura y pescado al microondas y seguía el problema se me ocurrió NO ponerle el poco de pastilla de caldo que le echaba al arroz y a partir de ahí, de suprimir los sopicaldos, empecé a mejorar.
Condimentos que me producen intolerancia y que debía evitar:
glutamatos, sorbitol y similares.
edulcorantes artificiales,
potenciadores de sabor,
garbanzos, alubias,
verduras crucíferas -berza y similares-,
caramelos sin azúcar, chicles y por extensión todo lo que diga en el paquete que es ligh sin azúcar,
bebidas carbonatadas.
Por extensión he aprendido a mirar el apartado 6 de los medicamentos donde especifican los otros excipientes como sorbitol, edulcorantes, colorantes y aromas.
Mi actual especialista en digestivo que lo es también en colon me dice que cada uno tiene sus intolerancias y que pueden no ser comunes a otras personas.
Voy a la compra con lupa.
Sigo esta dieta que me impide salir de casa a comer porque el problema no está en la comida en sí, sino en lo que le añadan sin que se vea. como puede ver mi problema está en que nada de eso es obligatorio que se ponga como aviso. Me deja con los ojos a cuadros la composición de los chuches infantiles: están llenos de potenciadores de sabor, así como pizzas, aperitivos y similares. El jamón York que se aconseja a los enfermos suele tener potenciadores de sabor -cuya composición se desconoce-, así como casi todos los fiambres
Aunque Vds no se dediquen a esto, me está aliviando mucho el tomar kefir además de yogur para reponer la flora intestinal y ya no tengo problemas. cuando temo haber comido algún preparado por distracción y como algo excepcional tomo un par de cápsulas de carbón activado. Algo no demasiado aconsejado para hacerlo con frecuencia porque es antídoto universal y contrarresta hasta lo bueno, perro ahora el espasmo o cólico correspondiente. Un saludo
Jessica Ramos
abril 18, 2017Muchísimas gracias por tu aportación María, que interesante lo del kefir, lo desconocía.
whiralais
mayo 15, 2017Completamente de acuerdo contigo. Las alergias e intolerancias no son causadas por los alimentos en sí, sino por todo lo que se les añade. Pero pasan de nosotros, no investigan más acerca de los aditivos, es muy rentable la venta de inyecciones de adrenalinas precargadas…
RGA
abril 18, 2017Hola,
Gracias por tu pequeño pero intresante artículo. Me ha gustado pero sin embargo, me hubiera parecido adecuado explicar la diferencia entre una alergia y una intolerancia alimentaria.
A grandes rasgos y de modo simple:
– INTOLERANCIA se refiere a que, por el motivo que sea, y sin que intervenga el sistema inmunologico en general, la persona no es capaz de digerir un alimento o bien, el contacto con este le genera problemas como diarrea, gases, irritación intestinal, pesadez… Unos ejemplos típicos son la intolerancia a la lactosa o al exceso de grasas en la dieta.
Con la lactosa, lo que ocurre es que a medida que vamos haciéndonos mayores e incluso a veces ya de niños, perdemos la capacidad de digerir lactosa, que es un hidrato de carbono presente de forma natural en la leche. Al no poder digerirla, tenemos molestias diversas y al final hay que evitar los lácteos o consumir los “sin lactosa”
Con las grasas suele ser un problema en los jugos digestivos que nos ayudan a emulsionarlas primero y a descomponerlas después. Así que según el grado, tendremos indigestión, cólico biliar, vómito, etc.
– ALERGIA es diferente el mecanismo. Ocurre que ante un alimento, el cuerpo identifica dicho alimento cómo un producto dañino, y el sistema inmunologico reacciona para defenderse de el. Es decir, tu cuerpo si puede digerirlo, pero por algún motivo, lo quiere fuera de ti. Entonces al activarse el sistema inmunologico, se desencadenan una serie de reacciones bioquímicas en el organismo como la secreción excesiva de histamina, revolución de los glóbulos blancos, fabricación de anticuerpos contra esa “sustancia mala”… La persona alérgica, acaba enfermando, a veces no sólo con problemas digestivos cómo dolor abdominal, vómitos, malestar… A veces si la reacción alérgica es severa, la persona afectada puede tener lo que se llama “shock anafiláctico” que es una reacción alérgica severa e intensa que puede poner en peligro su vida (dificultad repentina para respirar, hipotension, pérdida de conocimiento…).
Es lo que ocurre con el famoso ANISAKIS del pescado, por ejemplo. También le ocurre a aquellas personas que ante el más mínimo contacto con el marisco, enferman. O incluso con los cacahuetes. No es necesario ingerirlos, a veces la reacción alérgica se manifiesta tan sólo con inhalar los vapores de una rica sopa de langostinos, o con las partículas en el aire de unas almendras en el salón.
Al final, tanto con la intolerancia como con la alergia, la solución que se suele dar a la persona es evitar los alimentos, pero sin embargo, ambas situaciones pueden tener un tratamiento médico o basta con usar alimentos adaptados.
Tu médico te puede ampliar la información, hacerle las pruebas que necesites para identificar tu caso y, lo más importante, darte pautas y poner el tratamiento más adecuado en tu caso.
Un saludo y gracias por la oportunidad de dirigirme a vosotr@s “todoespecier@s”.
R.G.A.
Jessica Ramos
abril 18, 2017Muchísimas gracias por tu aportación R.G.A. tan importante, la complementa perfectamente.
Whiralais
mayo 15, 2017Las alergias e intolerancias no son causadas por los alimentos, ni por el desgaste propio de la edad, sino por los muchos aditivos que tienen añadidos desde su cultivo y procesado. No hay más que comparar la comida de hace treinta años con la de ahora, y ver que hay muchas personas jóvenes alérgicas e intolerantes cuyos organismos no se han desgastado aún. La OMS debería tratar más a fondo el tema de los aditivos, pero como siempre los intereses son otros, y lo más fácil es la dieta de evitación, por mucho que eso merme la calidad de vida de los afectados.
Legolas
mayo 15, 2017Gracias por escribir y aportar tu visión.
Quizás muchos aditivos y conservantes como tu dices, puedan afectar a muchas personas.
Pero incluso si cuando esas personas utilizan comidas ecológicas y no procesadas, pero siguen con alergia y/o intolerancia, esos argumentos se desmontan.
Que hay que usar más formas de conservación naturales, menos químicos y todo más a lo tradicional? Que hay intereses y la OMS quizás no actúe al 100% como debiera…. No digo que no. Pero no hay que mezclar cosas y asuntos.
Es mi opinión.
Saludos respetuosos a tod@s.