Estos buñuelos no eran de calabaza, eran de batata (boniatos), pero tenía calabaza en casa y la he utilizado para preparar la receta que Bal Arneson (la diosa de las especias en canal cocina) usa para preparar sus pastelitos de boniatos, que en definitiva son como buñuelos de batatas pero llevan además algunas hierbas y especias que le dan un toque exótico y diferente. Continue Reading
Cilantro
Pan hindú roti y salsa de yogurt con alcaparras
Los rotis son un tipo de pan hindú, parecidos a las tortitas de trigo típicas mexicanas, pero están rellenas de algo (normalmente verduras y especias). De esta manera quedan muy jugosas y las puedes acompañar de lo que sea o comerla a bocados simplemente porque ya de por sí son un alimento completo. Continue Reading
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Papas guisadas con carne
Papas guisadas, patatas guisadas, o “papas guisá” cómo decimos por Andalucía. Os voy a contar cómo hago yo las papas guisadas con carne. No tiene nada que ver con las que hace mi familia, porque a medida que voy aprendiendo cómo combinan las especias y me familiarizo con ellas voy sabiendo que le pega y me salen unos platos riquísimos y con mucho sabor (y sin apenas sal). Este plato le gusta a todo el mundo y siempre sale bien, así que ¡adelante!:
¿Qué necesitamos?
- 5 o 6 patatas.
- Verduras: tomate, zanahorias, cebolla, pimientos rojo y verde, calabacín. Las cantidades varían según lo que tenga en el frigorífico, pero siempre sale bien.
- 1 kilo de carne de cerdo o ternera troceado.
- Aceite de oliva.
- Agua.
- 1/2 vaso de vino blanco.
- Especias: 1 hoja de laurel, 1 cucharadita de cúrcuma, 1 cucharadita de comino molido, 1 cucharadita de semillas de cilantro molido, pimienta negra recién molida, 1/4 de cucharadita de nuez moscada, 1 cucharadita de tomillo y sal.
¿Cómo se hace?
Pelamos las patatas, las cortamos en dados grandes, las lavamos y reservamos.
- Lavamos las verduras, las cortamos y las sofreímos en aceite de oliva. Cuando estén blanditas les añadimos todas las especias, la sal y removemos.
- Añadimos el vino blanco y esperamos a que reduzca. Cuando apenas haya caldo sacamos las verduras y las trituramos con la batidora (menos la hoja de laurel que la guardamos para luego).
En el mismo aceite de las verduras “sellamos la carne” a fuego alto y a continuación le añadimos el sofrito triturado, el laurel, las patatas y un litro de agua aproximadamente (lo necesario para cubrirlo todo). Tapamos la olla exprés y dejamos cocinar por unos 25-30 minutos, contados a partir de que empiece la ebullición.
- Pasado ese tiempo las apartamos y le retiramos el vapor del interior. Probamos y rectificamos la sal si fuera necesario. No es conveniente removerlas porque se rompen, y lo chulo es verlas enteras. Ya las tienes listas.
Mucha gente usa colorante alimentario en vez de cúrcuma, pero eso es porque no conocen los beneficios que aporta la cúrcuma. Aparte de que colorea igual los alimentos, es mucho mejor porque es un producto natural, es la raíz de una planta y tiene la cualidad más importante de ser anticancerígena, todos deberíamos tomarla todos los días nada más que por eso. Además es antibacteriana, antiinflamatoria y adelgaza. Cada vez se descubren más propiedades de esta especia y es muy aconsejable su uso, tanto interno como externo. Yo desde que la conozco la uso bastante, y la verdad es que me encanta.
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Biryani de pollo
El biryani es un plato hindú que combina normalmente alguna carne, con arroz, frutos secos y especias. Se hace con arroz basmati y la diferencia con un guiso de arroz de los nuestros es, principalmente, en la combinación de especias que utilizan y además usan yogurt durante su elaboración. Es curioso y le da una textura más suave, a la vez que dulce. Luego se contraresta con la acidez del limón y el crujiente de los frutos secos… En definitiva, es un plato muy completo y sabroso del que no se puede prescindir si queremos conocer la gastronomía hindú. Os cuento cómo lo he hecho:
¿Qué necesitamos?
400 g de pechugas de pollo.
- 200 g de arroz basmati.
- Verduras: 1 cebolla grande, 1/2 pimiento verde y 1/2 limón.
- 2 cucharadas de mantequilla.
- 1 yogurt natural.
- Agua (1,5 veces la cantidad de arroz).
- Frutos secos: 30 g de anacardos y 1 cucharada de almendras.
- Especias: 1/2 cucharadita de cúrcuma, otra media de comino, otra media de canela (o media rama de canela), 3 vainas de cardamomo, 1/4 de cucharadita de cilantro molido, 1/4 cucharadita de guindilla molida (yo no la usé), 1 cucharadita de jengibre fresco, unas hojas de cilantro, 1 clavo y sal.
¿Cómo se hace?
Picamos finamente la cebolla y la freímos en un poco de aceite de oliva.
- Limpiamos el pollo de la grasa y lo cortamos en daditos. Lo añadimos a la sartén y freímos a fuego alto durante 2 minutos (removiendo para que no se pegue).
- Echamos una a una las especias, y con los dedos, para que se distribuyan bien, añadimos la sal y removemos.
- Añadimos el pimiento, la mantequilla y el yogurt y volvemos a remover.
- Enjuagamos el arroz varias veces (para quitarle el almidón) y lo echamos en la sartén. Removemos durante 1 minuto.
- Agregamos el agua (será un vaso y medio más o menos). Removemos un poco, tapamos la sartén y lo dejamos cocer por unos 20 minutos a fuego lento.
- Una vez se haya consumido el caldo (pasados los 20 minutos), añadimos el zumo de medio limón, removemos un poco con un tenedor (para despegar los granos) y ya lo tienes listo.
Como opción algunos hindúes colorean algunos granos de arroz con colorante alimentario, cuando los granos ya están cocidos. Para ello sacan dos cucharaditas del arroz y lo incorporan a agua con colorante (yo he elegido el color verde). Se dejan 5 minutos y luego se escurren y se incorporan al guiso. Le da un toque muy divertido y original.
El resultado ha sido un plato súper aromático y consistente. La mezcla de especias que he usado son las propias de los biryanis mas la cayena, que he prescindido de ella porque no quería que fuera un arroz picante. Pero si quieres saber como es el sabor de un auténtico biryani no puede faltar en ningún plato. Puedes usar todas las especias por separado o comprar el preparado ya hecho en nuestra tienda (biryani masala molido o con las especias enteras whole masala) y usar una o dos cucharaditas, según el gusto que le quieras dar. Cualquiera de las opciones serán perfectas.
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Mis primeras samosas
Pongo en el titular mis primeras samosas porque pienso hacer muchas más, y para el que ya sepa cómo hacerlas que no se ria mucho de mí. Lo he hecho lo mejor que he podido, y ahora que se cómo se hacen ya se que no debo hacer la próxima vez.
Las samosas son una especie de empanadillas hindúes (triangulares), pero hechas con masa brick. La masa brick está hecha con harina de trigo, agua, aceite y sal y el grosor debe ser muy fino (casi transparentes), pero lo suficientemente consistentes como para que al freírlas no se desmoronen.
Se pueden hacer dulces o saladas, y el relleno puede ser de lo que sea. En la India las suelen hacer vegetales sobre todo (porque la mayoría son vegetarianos), aunque también pueden estar rellenas de carne de pollo, o cordero, picada. También he visto recetas con rellenos de queso o chocolate. Tienen que estar buenísimas.
Yo he elegido hacerlas de verduras y la masa brick la he comprado ya elaborada para no perder tanto tiempo. Os cuento cómo las he hecho:
¿Qué necesitamos?
Láminas de masa brick.
- Aceite o ghee.
- 1 vaso de agua o caldo de verduras.
- Verduras: 1 cebolla, 1 zanahoria, 1 trozo de jengibre fresco, 1 patata y 1 puñado de guisantes.
- Especias: 1 cucharada de curry madrás, 1/2 de cúrcuma, 1/2 de comino molido, 1/4 de cilantro molido, sal, pimienta negra recién molida y un manojo de hojas de cilantro.
¿Cómo se hacen?
- Freímos las cebollas en una cucharada de aceite de oliva o ghee (cortada en trozos muy pequeñitos).
- Cuando estén blandas, pelamos y rallamos el trozo de jengibre y lo incorporamos a la sartén.
Añadimos las especias y el resto de verduras (cortadas en daditos pequeños). Removemos para que se mezclen bien los sabores.
- Vertemos el agua sobre las verduras, bajamos el fuego a la mitad y dejamos cocer por unos 30 minutos. Cuando el caldo se haya consumido ya lo tienes listo para rellenar las samosas.
- La masa brick viene en círculos. Según el tamaño que queramos conseguir, cortamos tiras con ese grosor (lo normal son unos 7 centímetros.). Los bordes circulares los despreciamos para que la forma de triángulo quede lo mejor posible.
- Tomamos una cucharadita de las verduras y la ponemos en la tira. Vamos enrollando la masa tal cómo aparece en las fotos. ¡Es muy divertido!
- Cuando las tengamos todas listas las freímos en aceite muy caliente y después las dejamos sobre un recipiente con papel absorbente para eliminar el exceso. Ya las tienes listas.
La receta original lleva chile y ajo, pero yo no los he usado para que la receta pueda ser apta para toda la familia.
Las he servido con un chutney de granada para mojar, que tenía ya preparado, y de acompañamiento he hecho un arroz basmati con semillas de comino e hinojo. Comida 100% hindú.
En mi opinión están muy ricas pero me parecen muy pesadas (al estar fritas). La próxima vez las haré al horno y así engordarán menos también.
También se me ocurre que a la hora de saltear las verduras puedo añadir la patata ya cocida y así tardaré menos en prepararlas. Sólo habría que freír las verduras con las especias, vuelta y vuelta y se acabó.
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Receta de Guacamole
El guacamole es una salsa mexicana, para mojar, con muchas variantes. He visto cantidad de recetas de guacamole, que he probado, pero realmente, cómo más me gusta el guacamole es cómo te explico a continuación:
¿Qué necesitamos?
- 1 aguacate maduro.
- 1/2 limón.
- Especias: sazonador de fajitas y cilantro.
¿Cómo se hace?
- Cortas el aguacate por la mitad y giras de cada mitad para un lado distinto (cómo si lo desenroscaras) y retiras con una cucharita el contenido.
- Trituras el interior del aguacate con un tenedor y cuando esté hecho una pasta le añadimos las especias y el zumo de medio limón. No hace falta echarle sal porque el preparado de especias ya las incluye. Remueves bien y ya lo tienes listo.
- Hay que tomarlo recién hecho porque si no pierde mucho. Pero si te ha sobrado y lo quieres conservar, guárdalo en el frigorífico, en un frasco cerrado, junto con la semilla del aguacate. Ésto hará que te dure más tiempo.
Si lo quieres probar con otro sabor súper bueno, échale nuestras especias para ensaladas, le quedan genial también.
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Pollo al tandoori masala
Este pollo no necesita presentación, ya que el que ha ido alguna vez a un restaurante hindú, o le gustan las especias, conoce perfectamente esta receta. En mi casa se prepara bastante, porque es muy fácil y el pollo queda súper jugoso y sabroso. Además el aspecto que le da el color rojo lo hace muy apetecible. De hecho, en la India, el color rojo es fundamental en las carnes, igual que para nosotros el color amarillo es fundamental en una paella, por ejemplo. No me enrollo más y os cuento cómo lo hacemos:
¿Qué necesitas?
- 1 kilo de pollo (que pueden ser muslos, pechugas, alitas, o lo que quieras).
- 1 yogurt natural (yo he usado los tipo griegos que son más cremosos).
- Verduras: 1 cebolla y 1 limón.
- Especias: 1 cucharada de especias tandoori masala, cilantro en hojas y sal.
¿Cómo se hace?
- Limpiamos bien el pollo, quitándole la piel y la grasa.
- En un bol mezclamos el yogurt con las especias tandoori y embadurnamos bien el pollo con la mezcla. Lo dejamos macerar en el frigorífico unas 12 horas o más.
- Cuando lo vayamos a preparar, precalentamos el horno a 220º, cortamos la cebolla en juliana y la ponemos en la base del recipiente.
Colocamos el pollo encima y le echamos por encima la sal y el zumo de medio limón. El otro medio limón lo cuartemos y lo ponemos en el recipiente junto al pollo.
- Lo metemos en el horno y cuando esté dorado por una parte le damos la vuelta y esperamos a que se dore por la otra.
- Justo unos minutos antes de sacarlo del horno, esparcimos el cilantro por encima y esperamos unos minutitos con el horno ya apagado para aprovechar el calor residual. Ya lo tienes listo.
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Salsa potente de chile chipotle
Hoy vamos a preparar una salsa potente, como todas las mexicanas, para usarla con unas fajitas de pollo, que haremos para la cena, y mojaremos también con unos nachos.
En esta ocasión, vamos a ponerle picante con unos chiles chipotles, que están muy de moda últimamente gracias a su divulgación por los programas de “Pesadilla en la cocina” (de Chicote) y Top chef. Así que nos hemos animado a probarla, y como siempre, os contamos cómo se hace:
¿Qué necesitamos?
- 3 chiles chipotles.
- 8 tomates rojos (yo he usado los tipo pera).
- 1 cebolla.
- Especias: cilantro en hojas, comino molido y sal.
- 1 diente de ajo (aunque yo no lo he usado).
¿Cómo se hace?
- Primero hidratamos los chiles (en el enlace explicamos cómo se hace).
- Se tuestan los tomates, la cebolla y los chiles chipotles en una sartén, sin nada de grasa, hasta que estén bien tostaditos.
- Lo batimos todo, con un poquito de agua, y lo volvemos a echar en la sartén.
- Añadimos la sal y el comino molido (una cucharadita) y dejamos a fuego lento durante unos 20 minutos o más. Remover de vez en cuando.
- Cuando se haya consumido el agua y esté espesito le añadimos las hojas de cilantro bien picaditas y removemos. ¡Ya lo tienes listo!
Te advierto que es una salsa bastante picante, así que si no lo toleras, o te gusta más suave, siempre le puedes echar menos cantidad de chile, con una unidad ya está muy rico también, pero en esta casa somos muy espartanos y nos gusta el pique cantidad.
¡Que lo disfrutéis!
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¿Te gusta la mostaza? pues vas a flipar con esto…
Hoy vamos a hacer mostazas caseras. Me ha encantado prepararlas, porque la mostaza es mi salsa favorita y he inventado muchos sabores distintos que nunca antes había probado, y teniendo como base el picantito rico de la mostaza. Os enseñamos como se hace:
Primero hacemos una mostaza a la antigua, hidratando con agua hirviendo una mezcla de granos de mostaza amarilla (o blanca) y mostaza roja o parda (la negra la hemos descartado porque pica mucho). Podéis usar la misma proporción para los dos tipos de granos aunque yo os recomiendo que uséis sólo la amarilla, o en mayor parte, porque la marrón pica mucho más. Esperamos unos 20 minutos, para que las semillas absorban el agua y se pongan más blanditas, y ya podemos añadirle el resto de los condimentos, que son el vinagre (o limón), el azúcar (o miel) y la sal.
Con esa base he ido sacando del tarro un poco cada vez y lo he mezclado a continuación con especias variadas.
- La roja es mostaza cajún: para la cual he utilizado unas 4 cucharadas de mostaza a la antigua y le he añadido las especias cajún que son: tomillo, orégano, albahaca, pimienta negra, comino molido y pimentón. La cayena, que es otro componente del condimento cajún, no la he usado porque la mostaza pica ya bastante; tampoco he usado ajo en polvo porque no lo puedo comer. Puedes encontrar el preparado de especias cajún en nuestra web o hacerlo con estas especias mas o menos en la misma proporción.
- La marrón es mostaza campera: y está compuesta por orégano, comino en grano y miel.
- La verde es mostaza al cilantro: lleva cilantro en hoja y el zumo de medio limón.
- Y la amarilla es mi mostaza preferida: le he echado cúrcuma (de ahí el color amarillo), canela, miel y nueces trituradas.
Si veía que la mezcla me quedaba muy espesa le añadía un poco de agua. También probaba y rectificaba el azúcar y la sal para darle el toque perfecto a cada una.
No había terminado de hacerlas y ya me estaba imaginando la de platos que iba a preparar con ellas, sobre todo al horno con un pollito asado o unas patatitas, salchichas, un aliño para ensaladas mezclado con una vinagreta o mahonesa… ¿se te ocurre algún plato más? ¡pues compártelo con nosotros!.
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Falafel con salsa de yogurt al cebollino
Los Falafel son una especie de “croquetas” de garbanzos, de origen marroquí, pero redondas y un poco aplastadas. Están buenísimas y acompañadas de una salsa de yogurt ya ni te imaginas. Os explicamos como se hacen:
¿Qué necesitas?
Para los falafel:
- 500 gramos de garbanzos (en remojo del día anterior).
- 1/2 cebolla.
- 1 cucharada de bicarbonato.
- 1 cucharadita de sal.
- Pan rallado.
- Aceite de girasol para freír.
- Especias: hojas de perejil y Cilantro (un manojo de cada), culantro y comino (una cucharada de ambas, molidas). También puedes usar nuestro preparado de especias para falafel, para darle un toque más auténtico.
Para la salsa:
- 1 yogurt tipo griego.
- 1 cucharada de Cebollino.
- Zumo de medio limón.
- Sal y azúcar.
¿Cómo se hace?
- Escurres los garbanzos y los lavas bien. Después los trituras con la batidora.
- Cuando estén hechos una crema añades la cebolla, el perejil y el cilantro (todo picado) y vuelves a triturar.
- Por último echas las especias molidas, la levadura y la sal y dejas reposar la masa una hora como mínimo.
- Pasado ese tiempo, vamos cogiendo con las manos un poco de la masa y formamos bolitas con ella. Luego las aplastamos un poco y ya están listas para freír (yo he usado aceite de girasol). Si la consistencia no te da para hacer una bola le puedes añadir un poco de pan rallado o harina, pero sin pasarse para que no se queden pastosas.
La salsa es muy sencilla de hacer:
- Mezclas el yogurt con el cebollino, le añades un chorreoncito de limón, un poco de sal y azúcar (para corregir la acidez) y listo.
¡Si a los peques les ha encantado no debe estar nada mal!
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